En nuestras relaciones con los demás, suelen surgir problemas que hemos de resolver. Los problemas pueden ser personales, familiares, con amistades…
Todas las personas tenemos problemas. Lo importante no es que haya problemas, sino aprender a solucionarlos.
Ante cualquier problema que se nos presente, o situación en la que haya que tomar una decisión, lo mejor que podemos hacer es seguir los siguientes pasos:
TRANQUILIZARNOS, pues el nerviosismo nos hace cometer más errores.
IDENTIFICAR EL PROBLEMA, lo que quiere decir definirlo con toda claridad.
PENSAR EN VARIAS SOLUCIONES que puedan resolver la situación.
ADELANTAR POSIBLES CONSECUENCIAS que pudiera tener cada una de las soluciones buscadas.
TOMAR UNA DECISIÓN, eligiendo aquella que nos ha parecido la mejor de todas después de analizar sus consecuencias, y ponerlas en práctica.
Finalmente, valorar los resultados obtenidos; si son satisfactorios, estupendo; si no, se pondrá en marcha otra de las soluciones que analizamos (todas las personas tenemos derecho a equivocarnos).
Comments