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15 de agosto Día Internacional de la Relajación


Este fin de semana con la celebración del Día Internacional de la Relajación, les traemos varias técnicas de relajación.

¿Qué es eso de “relajación”?

La relajación consiste en aflojar el tono muscular y calmar la mente hasta llegar a un estado de confort pleno tanto mental como físico.


¿Qué beneficios se obtienen de la relajación?

Elimina la tensión muscular.

Favorece la recuperación de la fatiga.

Nos ayuda a descansar.

Favorece el sueño reparador.

Previene el estrés, la fatiga y el insomnio.

Reduce la tensión arterial.

Genera una sensación de bienestar.

Ayuda a mejorar la autoestima.

Reduce la tensión emocional.

Favorece la ruptura de pensamientos negativos recurrentes.


¿Qué técnicas existen?

Existen diferentes técnicas para practicarla, el uso de una o de otra dependerá de las preferencias de cada persona, en función de aquella con la que nos sintamos más a gusto o con la que nos resulte más fácil relajarnos.


Muchas personas no saben cómo pueden relajarse, incluso aunque lo desean. Por esa razón, Te proponemos dos técnicas de relajación para que practiquen en casa, solo tienen que elegir el momento:


Respiración

Esta técnica es la más fácil, y por ello una de las más útiles, ya que no requiere demasiada práctica para dominarla. Se debe hacer muy lentamente y un poco más intenso de lo normal, pero sin tener que llegar a forzar la respiración.


Para comprobar si se hace bien, es preciso poner una mano en el pecho y otra en el abdomen: se hará bien si al respirar sólo se mueve la mano del abdomen.


PASOS:

  1. Siéntate en una postura cómoda, manteniendo la columna vertebral recta, apoyándola en el respaldo de la silla y las plantas de los pies bien apoyadas en el suelo.

  2. Presta atención a posibles signos de tensión en el cuerpo.

  3. Coloca una mano sobre el abdomen y otra sobre el pecho.

  4. Toma aire, lenta y profundamente, por la nariz. Hazlo llegar hasta el abdomen mientras cuentas mentalmente hasta 4.

  5. Haz una breve pausa, manteniendo la respiración y contando mentalmente hasta 4 también.

  6. Expulsa el aire lentamente por la nariz, contando mentalmente hasta 8.

  7. Haz otra breve pausa antes de repetir la secuencia.

Relajación muscular progresiva

Esta técnica consiste en tensar y relajar los distintos músculos de la zona en la que encuentras las sensaciones desagradables, tratando de notar la diferencia entre un estado y otro, y de disfrutar de la sensación que aporta la distensión de los músculos. Es importante ir soltando el aire de los pulmones mientras mantienes la tensión con el objetivo de agotarlos antes.

Para esta técnica, asegúrese de que dispone al menos de 20 a 25 minutos. La técnica en sí es muy sencilla y consiste en ir relajando progresivamente los distintos músculos del cuerpo, con lo que se logra eliminar la sensación de tensión muscular, consiguiendo que desaparezca el malestar que produce la contracción.

Se requiere una práctica continuada (una vez al día, en un estado de calma, durante dos o tres semanas).

Para ayudarse a hacer esta relajación puede poner música relajante.


Pasos:

.-Lleva la atención de tu mente a un punto concreto de tu cuerpo donde percibes tensión. Esta tensión puede ser tanto emocional o muscular.


.-Hazte muy consciente de todas las características del malestar y puntúa su intensidad. 0, no te molesta. 10, lo máximo que puedes aguantar.


.-Tensa los músculos de la zona en la que encuentras las sensaciones desagradables y, desde ese punto, continúa aumentando la tensión de todo el cuerpo, mientras sueltas el aire, hasta que no puedas más.


.-Permite que el cuerpo inspire con libertad 3 o 4 veces haciéndote consciente de los cambios y puntúa.


.-Repite los pasos 3 y 4 hasta que desaparezca el malestar.




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