Cómo utilizar los estímulos positivos para el aprendizaje de los hijos y de las hijas
En la educación de nuestros/as hijos e hijas, a veces encontramos situaciones sencillas y agradables, pero en otros momentos las situaciones se tornan complicadas. ¿Han oído eso alguna vez cuando son bebés? “qué bonito es, está para comérselo” y cuando crecen y aparece algún problema aquello de “no sé por qué no me lo comí en su momento”…
Cada persona somos un mundo, con nuestras virtudes y nuestras dificultades y no hay un manual de instrucciones para ser padre o madre. Podemos tener mucha experiencia, nos aconsejaran y nos dirán en muchas ocasiones que hacer para que el desarrollo de nuestros hijos e hijas sea el más adecuado…pero para reducir obstáculos debemos conocer las estrategias más empleadas en la psicología educativa del siglo XXI. Una de las más potentes es sin duda el Refuerzo Positivo que consiste en ofrecer los niños y las niñas un estímulo agradable cada vez que éste o esta emite una respuesta adecuada, así tenderá a repetirla en mayor medida. Por ejemplo, le ofrecemos una sonrisa y halago después de ordenar su cuarto, le damos un helado si se ha portado bien toda la tarde en casa de l@s abuel@s, le permitimos ver la TV si ha hecho los deberes…
En el siguiente enlace puedes obtener más información de cómo actuar ante distintas circunstancias y en las que te proporcionan: “6 consejos de cómo educar a los niños y a las niñas con refuerzos positivos”